La importancia de la iluminación es básicamente algo relevante en toda situación o área de trabajo para cualquier persona. Esto se basa en la simple argumentación que al menos el 80% de nuestras principales actividades, necesitan estar en constante equilibrio de una excelente iluminación para el sentido de la visión.
La iluminación dentro de una empresa es un aspecto que ha comenzado a regularse en distintas normativas a nivel internacional, debido a los diversos problemas que podría ocasionar un inadecuado sistema de iluminación existente para la ejecución de cualquier tarea fundamental por un trabajador. Por ello, dedicaremos especial atención en el siguiente artículo en definir los principales criterios y elementos fundamentales que implica a la iluminación como una parte fundamental del acondicionamiento ergonómico de los puestos de trabajo.
Los beneficios de una buena iluminación en el trabajo han estado ampliamente documento en diversos estudios, una excelente iluminación en el ambiente de trabajo implica mejores condiciones para cumplir de forma adecuada cualquier actividad que implique el uso de la visión como elemento imprescindible.
La iluminación dentro de una empresa debe asegurar los diferentes niveles de intensidad luminosa en concordancia con el uso de su color, contraste, control de posibles deslumbramiento y confort visual para todos los trabajadores.
Una buena iluminación en un área de trabajo tendrá que adaptarse siempre a las propias características de las actividades que desempeña un trabajador, teniendo en cuenta factores como: riesgo de seguridad y salud, dependientes de las condiciones de visibilidad y las exigencias visuales en función de las tareas desarrolladas.
La iluminación en el puesto de trabajo, cuando es adecuada y óptima, contribuye notablemente en aumentar la productividad laboral, reduce el número de accidentes, disminuye los posibles errores, atenúa la fatiga visual, reduce el ausentismo laboral, se incrementa el porcentaje de confort visual y permite la buena actitud y desempleo de funciones.
La iluminación en el centro de trabajo debe priorizar aspectos básicos que conllevan optimizar varios parámetros fundamentales como son el flujo luminoso, la intensidad lumínica, rendimiento luminoso, luminiscencia, reflectividad, contraste, visibilidad y colores, por lo cual siempre es idóneo contar con especialistas que se encarguen de estos aspectos fundamentales.
La importancia de una buena iluminación en el trabajo siempre estará percibida incluso como un elemento que puede causar mala impresión a clientes e incluso trabajadores, no es muy adecuado que una tienda de ropa se mantenga con poca iluminación, la funcionalidad de una buena iluminación está en notoria relación con la calidad de un puesto de trabajo.
Mantener una buena iluminación en el trabajo determina que la seguridad laboral en cualquier empresa o sitio de trabajo aumente notablemente los índices de productividad, pues diversos estudios han determinado que una calidad óptima de este factor está vinculada con una reducción en la tasa de posibles bajas laborales, por lo cual siempre debemos considerar este aspecto en nuestro desarrollo de actividades.
En la mayoría de los casos se debe preservar o cumplir que la importancia de una buena iluminación en el trabajo garantice, la distribución de la iluminación de forma uniforme, manteniendo unos contrastes adecuados, evitando posibles deslumbramientos, sea por luz artificial, luz natural y posibles superficies reflectantes y mucho menos usar sistemas de iluminación que perjudiquen el contraste visual, la medición de profundidad o impresión de intermitencia que produzca efectos estroboscópicos.